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Durante febrero de 2018, los costos del transporte bajaron 0,22 por ciento, lo que según la Federación Argentina de Entidades Empresarias del Autotransporte de Cargas (FADEEAC), que cada mes realiza el Índice de Costos, es una ilusión, ya que el panorama para el autotransporte de cargas continúa preocupando y afecta la competitividad y el crecimiento del sector.

Desde la federación prevén un incremento del 11 por ciento en los costos debido al aumento de los salarios en marzo, la suba del gasoil (desde el 1 del mismo mes) y el incremento del dólar (llegó a superar los 43 pesos) y los peajes.

Continuando con el combustible, en FADEEAC informaron que impacta cada vez más en las estructuras de costos del transporte. Durante 2018, elevó su precio un 77 por ciento, mientras que el aumento fue superior al 100 por ciento a partir de la desregulación del mercado de hidrocarburos (se llevó a cabo el 1 de octubre de 2017). Las subas del gasoil “están afectando seriamente” el normal funcionamiento del transporte de cargas en el país.

De esta forma, el análisis del Departamento de Estudios Económicos y Costos anticipó una suba de al menos el 5 por ciento para el tercer mes del año y un piso del 8% para el primer trimestre de 2019.

Con estos datos, desde la entidad subrayan la continuidad de la aceleración de los costos nacional para llevar a cabo el transporte de cargas, que registró un aumento de casi un 40 por ciento entre julio y diciembre del año pasado.

Cabe recordar que los costos se habían incrementado un 3,11 por ciento en enero y un 61,5 por ciento durante el año anterior (superó por más de 35% el incremento de 2017, que fue del 23,9%), que además registró el aumento más elevado luego del año 2002.

La federación además también subrayó la presión de la carga impositiva, que es de aproximadamente el 40%.