A favor del medio ambiente, Volkswagen Camiones y Buses sigue trabajando con el objetivo de minimizar el impacto de sus operaciones en la planta de Resende, donde produce camiones que llegan al mercado argentino.
La compañía anunció que, durante el último año, “gran parte de los esfuerzos” estuvieron destinados al incremento del reciclaje de los desechos producidos por las actividades de la planta ubicada en el país vecino.
A través de la evolución en el proceso, la marca incrementó el volumen reciclado del 56 al 81 por ciento en un período de tres años.
Volkswagen también optimizó la recolección selectiva y la clasificación de residuos, mejoró su proceso y llevó a cabo el desarrollo de una campaña de concientización para sus empleados. Asimismo, modernizó su fabricación con el objetivo de ahorrar recursos.
La empresa de origen alemán posee un nuevo sistema de baños de pretratamiento para la pintura de las cabinas, una tecnología que le permitirá a la planta ahorrar 450 mil litros en el consumo anual de agua.
VW además trabaja para disminuir el volumen de agua utilizado durante la operación. Para eso, lleva a cabo el monitoreo del consumo, con el objetivo de evitar el desperdicio.
A lo mencionado anteriormente se suma la presencia del cinturón verde. Recientemente, la marca colocó plantas para reforzar los alrededores de la fábrica, donde existen más de veinte especies diferentes.
“Nuestro plan es mejorar estos índices cada vez más como parte de nuestro compromiso medioambiental, mientras invertimos en un consumo más eficiente de energía, agua y otros recursos naturales”, comentó Adilson Dezoto, vicepresidente de producción y logística de Volkswagen Camiones y Buses.
Por su parte, el gerente ejecutivo de ingeniería de fabricación Marcelo Vidal, añadió: “A pesar de una mayor producción en 2019, también avanzamos para reducir el consumo de energía en un 5% gracias a una mejor administración con sistemas automatizados y la instalación de equipos más eficientes”.