Mercedes-Benz de Brasil alcanzó las 150.000 unidades de camiones y buses exportados a través del kit de ensamblaje CKD (completamente desmontados), que consta de un paquete de piezas destinadas al ensamblaje final.
El nuevo hito de la marca de origen alemán fue posible gracias a la acumulación de unidades desde la década del 70, en la que la empresa arrancó la exportar de vehículos CKD. El año pasado registró 3.669 unidades que salieron del país vecino.
Los camiones y buses representan actualmente el 40 y 60 por ciento respectivamente de las exportaciones de productos a través del sistema CKD. Son producidos en la fábrica de São Bernardo do Campo.
Los productos de origen brasileño están dirigidos a las plantas de Daimler Truck o de Mercedes-Benz en Argentina, México, Egipto, Kenia, Argelia y Sudáfrica, además de tener presencia en Indonesia, Taiwán y Vietnam.
Por otro lado, la operación de Mercedes-Benz CKD cuenta con la presencia de las tecnologías 4.0, que se combinan con los más de 170 colaboradores que están dedicados exclusivamente a esa tarea en la planta brasileña.
“Las ventas de vehículos desmontados son muy importantes para el volumen de exportaciones de la compañía, que también vende camiones y chasis completos de buses al mercado externo. Además, contribuye al volumen de producción de las plantas de São Bernardo do Campo y Juiz de Fora”, dijo Achim Puchert, presidente y CEO de Mercedes-Benz de Brasil América Latina.
Y agregó: “CKD es una herramienta importante para expandir nuestras actividades en los mercados de exportación y también crea empleo. Actualmente ofrecemos a los clientes productos CKD personalizados desde camiones de las familias Accelo y Atego y desde toda la línea de buses urbanos e interurbanos, desde micro hasta superarticulados”.
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