En agosto de 2020, los costos del transporte en Argentina registraron un aumento del 5,11 por ciento en comparación con el mes anterior. Así lo indicó el Departamento de Estudios Económicos y Costos de la Federación Argentina de Entidades Empresarias del Autotransporte de Cargas (FADEEAC).
En el octavo mes del año, el sector tuvo su incremento más elevado del año, además de registrar un 32 por ciento más que el mismo mes de 2019. Por su parte, el aumento acumulado entre enero y agosto fue del 16,4 por ciento respecto del mismo período del año pasado.
El mayor aumento de agosto fue para el costo laboral, que se modificó un 8 por ciento, mientras que el combustible tuvo un incremento del 4,44% (fue el primero de 2020), las reparaciones treparon 2,44% y los gastos generales subieron 4,04%.
A lo mencionado anteriormente se suman otros incrementos: costo financiero (14,91%), seguros (5,27%), neumáticos (4,06%) y material rodante (0,47%). Además, lubricantes, patentes, tasas y peajes no registraron cambios.
Entre enero y agosto, así fueron los incrementos de los costos del transporte en Argentina: patentes (57,9%), gastos generales (37,6%), personal (31,3%), neumáticos (30,6%) y combustibles (3.7%), mientras que el costo financiero bajó un 14,9%.
Tanto en la cifra mensual como la acumulada muestran una tendencia a la desaceleración que además está presente en los precios minoristas y mayoristas. Según FADEEAC, se mantendrían si no existen “cambios abruptos en la política cambiaria o subas en el valor del Brent por encima de los 45 dólares”.
“Este aumento era esperable, dado que el combustible y el personal conforman más de dos tercios en la estructura de costos del sector y ambos rubros tuvieron incrementos relevantes. Pero es importante tener en cuenta que el transporte no es un sector formador de precios, como cualquier actividad de servicios, necesita trasladar sus costos a las tarifas”, dijo Martín Borbea Antelo, secretario general de FADEEAC, quien añadió: “Lamentablemente seguimos con muchos problemas en las provincias a través de los distintos protocolos que cada gobernador o intendente quieren aplicar, a pesar de que ya existe un protocolo nacional. Esa falta de unificación en los criterios de control nos está complicando mucho la normal circulación del transporte. San Juan, La Rioja, Jujuy y San Luis son provincias de las que seguimos recibiendo denuncias de maltrato, fajado de puertas y peajes arbitrarios”.