El Grupo Volvo y Daimler Truck AG formaron una alianza con el objetivo de “liderar el desarrollo del transporte sustentable”, lo que concretarán con la fabricación a gran escala de celdas de combustible de hidrógeno.
Para las empresas, el éxito en la venta de la tecnología de celdas de combustible de hidrógeno es fundamental para lograr el objetivo del transporte neutral en cuanto a emisiones de CO2. Hay que recordar que el Green Deal europeo dispone un continente con transporte sostenible y libre de carbono para 2050.
El acuerdo preliminar no vinculante (prevén el acuerdo final para fines de 2020) es para crear un joint venture con el 50 por ciento para cada fabricante. El objetivo es desarrollar, producir y comercializar celdas de combustible de hidrógeno especialmente para vehículos pesados, además de otras aplicaciones.
Con el nuevo acuerdo, Daimler afianzará sus actividades actuales en cuanto a la tecnología de celdas de combustible, mientras que el Grupo Volvo obtendrá el 50% con unos 0,6 billones de euros.
El joint venture además actuará como una entidad independiente y autónoma y permitirá reducir los costos de desarrollo para las dos empresas. También estimulará el lanzamiento de sistemas de celdas de combustible en los vehículos destinados al transporte pesado y de larga distancia. Tendrá operaciones en Nabern, Alemania (la sede central de Mercedes-Benz Fuel Cell GmbH), junto con plantas de producción en Alemania y Canadá.
La unión además tiene como misión que Daimler y Volvo vendan vehículos pesados de larga distancia con la mencionada tecnología, lo que podría ocurrir desde la segunda mitad de la década. A lo mencionado se suma la posibilidad de la utilización en otras aplicaciones automotrices y de otros rubros.
“El transporte y la logística mantienen el mundo en movimiento, y la necesidad de transporte continuará creciendo. El transporte neutral en CO2 se puede lograr a través de trenes de propulsión eléctrica o convirtiendo hidrógeno en electricidad. Para que los camiones puedan transportar cargas pesadas y recorrer largas distancias, las celdas de combustible son una respuesta importante y una tecnología en la que Daimler ha acumulado una gran experiencia en las últimas dos décadas a través de la unidad de negocios Mercedes-Benz Fuel Cell. Esta iniciativa conjunta con el Grupo Volvo es un hito para la producción de camiones y buses a base de celdas de combustible”, dijo Martin Daum, presidente del Consejo de Administración de Daimler Truck AG y miembro del Consejo de Administración de Daimler AG.
Por su parte, Martin Lundstedt, presidente y CEO del Grupo Volvo, agregó: “El transporte de carga eléctrico es un elemento clave para alcanzar el Green Deal y un mundo libre de carbono. El uso del hidrógeno como combustible ecológico para alimentar camiones eléctricos en operaciones de larga distancia es una parte importante del rompecabezas y un complemento para los vehículos eléctricos con batería y combustibles renovables. Combinar la experiencia de Grupo Volvo y Daimler en esta área para acelerar el desarrollo de esta tecnología es muy bueno tanto para nuestros clientes como para la sociedad en general. Al formar este joint venture, estamos demostrando claramente que creemos en las celdas de combustible de hidrógeno para vehículos comerciales. Pero para que esta visión se convierta en realidad, otras compañías e instituciones también deben apoyar y contribuir a este desarrollo, sobre todo para establecer la infraestructura de combustible necesaria”.