Mercedes-Benz continúa ampliando la gama de la nueva generación de la Sprinter producida en la planta bonaerense de Virrey del Pino. Se trata de la adaptación Food Truck, una flamante configuración destinada a la gastronomía.
La opción del utilitario de la marca alemana está basada en la versión Chasis y cuenta con un módulo producido totalmente con fibra de vidrio. Incluye 4 metros de largo, 2,20 de ancho y 1,92 de altura. Además, posee una generosa ventana que permite llevar a cabo la atención de los clientes.
Por su parte, el interior posee paredes con terminaciones de fibra de vidrio, instalación eléctrica integral con iluminación LED de bajo consumo y un equipamiento funcional personalizado según las necesidades de cada cliente.
La nueva propuesta de la marca alemana promete “la mejor tecnología en materia de vehículos especializados en gastronomía uniéndose con la fuerza y adaptabilidad de la nueva Sprinter”.
El carrozado Food Truck para la nueva Mercedes-Benz Sprinter cuenta con precios desde 14.390 dólares, cifra que se suma a los precios de la Sprinter Chasis (416 ó 516), que arrancan en los 30.950 dólares.
Por otro lado, la automotriz indicó que “está diseñada acorde a los requerimientos del mercado, con los mejores detalles de terminación y accesorios exclusivos. La propuesta de Mercedes-Benz cuenta con el respaldo, garantía y asesoramiento integral para la actividad gastronómica actual”.
Entre sus ventajas, los food trucks permiten adaptarse a cualquier lugar, por ejemplo, a los lugares con mayor concurrencia de gente. También se destacan por la versatilidad, ya que se adaptan a diferentes horarios y ofertas gastronómicas, y por la inversión, que es menor a la de un restaurante.