La siguiente etapa del desarrollo de transporte del futuro que lleva adelante Toyota Motor Corporation y Hino Motors (marca perteneciente a la japonesa), consistirá en una serie de pruebas en Tokio, Japón.
Los ensayos, que se extenderán desde el 24 y hasta el 30 de julio, tienen como objetivo acelerar el desarrollo tecnológico del autobús, pensando en el que será su futuro lanzamiento en ese mercado asiático.
Dichas pruebas, que contarán con la cooperación del Gobierno Metropolitano de Tokio, ayudarán a definir la viabilidad de los autobuses de nueva tecnología para su utilización en redes de transporte público, al mismo tiempo que permitirá evaluar la eficacia de su sistema de alimentación externa durante los apagones generalizados que hay en Japón a causa de los desastres naturales que sufre ese país.
Desarrollado conjuntamente entre Toyota y Hino, está basado en los autobuses Hino híbridos y su principal particularidad es el sistema de célula de combustible (doble) que Toyota creó para su modelo Mirai.
El dispositivo se encarga de generar la electricidad -con una reacción química entre el hidrógeno y el oxígeno del aire- para abastecer a dos motores eléctricos que cuentan con una potencia de 149.5 caballos y un torque de 335 Nm cada uno. A eso se le suma la presencia de ocho tanques de almacenamiento de hidrógeno de alta presión.
Hino fue la encargada de llevar a cabo el desarrollo del chasis y la carrocería, que cuenta con una longitud de 10.525 mm, un ancho de 2.490 y un alto de 3.340. Además, posee una capacidad interior para 77 personas.